De la mano de Haydée conocí de los sucesos del
Moncada. De su mano he aprendido a ser también más revolucionaria. Por esa
pasión que sin estar viva físicamente sembró en mí, son estos trabajos
dedicados a ella, en su mayoría y a sus dos grandes amores asesinados en julio
de 1953: Abel y Boris. Aquí les dejo varios trabajos a la familia.